Hoy salí de bañarme y me miré al espejo... Estaba empapado y empañado. Un reflejo deforme mio me miraba fijamente, y así como si nada, me puse a llorar... No sé porque, pero necesitaba llorar. Y miré viejas marcas de lagrimas no lloradas y lloré más. Y miré las nuevas, y aún más...
Y sigo sin enteder...
¿lloraba por estar feliz o lloraba por estar triste?
No sé, porque ni me alegré ni me deprimí. Simplemente, me di media vuelta, salí del baño sonriente (como siempre, eso no dice nada, o mejor dicho, dice mucho que pocos saben escuchar), salude a mi familia, y me vine a mi cuarto... Pero todavía no me voy a dormir... Me falta decidir si estoy feliz o triste...
Despupés les cuento...